APERTURA DE DIAFRAGMA – LUMINOSIDAD DE UN OBJETIVO
EXPLICACIÓN APERTURA DE DIAFRAGMA
Los objetivos de una cámara son los encargados de canalizar la luz para que se refleje en el sensor del cuerpo de la cámara. Esta luz es regulada por el diafragma. El diafragma se podría definir como un iris que se abre y cierra para dejar pasar más o menos luz. Como si fuera un embudo que controla la entrada de luz en la cámara. La apertura de diafragma nos lleva directamente al apartado de luminosidad de un objetivo: Cuando na lente de cámara tiene posibilidad de abrir mucho el diafragma, mayor luminosidad dejará entrar.
A mayor apertura de diafragma = Más luminosidad, más luminoso es el objetivo
Para aprovechar nuestro diafragma en su totalidad, tenemos primero que entender que nuestro diafragma tiene una serie de pasos (medidos con la famosa “F”) que reflejan la cantidad de luz que dejaremos entrar en nuestro objetivo fotográfico y que se mide de manera inversa. A más “F” (22, 16…) significa que estaremos dejando pasar menos luz. Por el contrario, a menos “F” (2.8, 1.4…), dejaremos pasar más.
¿QÚE USOS PUEDE TENER SABER CONTROLAR LA APERTURA DE DIAFRAGMA?
A nivel compositivo, los objetivos luminosos nos permiten manipular con mayor libertad la profundidad de campo, pudiendo reducirla para sacarle gran partido al enfoque que quiero que tengan mis fotografías y generar un bonito efecto bokeh.
Con objetivos luminosos (f/2, f/1.8, etc) también conseguiremos una buena exposición en entornos con poca luz, sin necesidad de modificar valores en el ISO, y sin llegar a tener notables ruidos o deformaciones en la imagen.
En los objetivos de tipo Zoom, además, conforme aumentamos la focal, disminuye la luminosidad entrante porque por construcción, el diafragma mínimo disminuye (por eso verás objetivos que marcan dos tipos de aperturas: En un objetivo que sea 70- 200mm, 3.5- 6.3f, querrá decir que a 70mm la apertura de diafragma máxima será 3.5f, y en 200mm la apertura máxima será 6.3f.
DIAFRAGMA DE CÁMARA ABIERTO
Si abrimos el diafragma (números f bajos como 1.8) haremos que más luz entre por el objetivo, consiguiendo una imagen con más luz.
DIAFRAGMA DE CÁMARA CERRADO
Por el contrario, si cerramos el diafragma (f22…) entrará menos luz en el objetivo, generando imágenes más oscuras.
Sin miedo a la oscuridad
Un objetivo luminoso, que te permita abrir el diafragma a valores de 1.8 o menores, ayudará a la hora de conseguir fotografías bien expuestas en lugares con poca luz.
Desenfoque
Que sea más luminosos, también quiere decir que tendremos menor profundidad de campo y por lo tanto más posibilidades de jugar con precisión con un enfoque más específica y generando fotografías con efecto Bokeh.
Precio
Por lo general, a mayor apertura de diafragma posible, precios más altos. Todo depende también de la calidad de los materiales del objetivo y la distancia focal del mismo.
Como resumen, podemos decir que conocer la apertura del diafragma de tu objetivo es de vital importancia para sacarle el mejor provecho. Siempre que sea posible y que el bolsillo pueda, intenta ir a por los objetivos más luminoso (con un número f. pequeño), ya que te garantizará fotografías luminosas hasta en espacio con luz reducida, así como imágenes con ese tan deseado desenfoque o efecto Bokeh
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